HIPERCONECTADOS Y ABURRIDOS

“Los chicos podrán entretenerse si les brindamos herramientas”

25 de Enero, del 2025 - Salud

La psicóloga Silvia Villa destacó en diálogo con N9 cómo las pantallas alteraron las formas de entretenimiento de los niños, impactando su capacidad de socialización y creatividad.  

 


En un contexto donde las pantallas están omnipresentes, especialmente durante las vacaciones escolares, el tiempo de ocio de los niños se vuelve un desafío para las familias. En diálogo con N9, la psicóloga Silvia Villa reflexionó sobre el impacto de la tecnología en las dinámicas de entretenimiento infantil y planteó alternativas para abordar el problema. “La hiperconexión no es nueva, pero lo que debemos analizar es qué hacemos los adultos al respecto y cómo influimos en la relación de los niños con las pantallas”, señaló.  

Según Villa, el acceso constante a dispositivos no solo afecta la creatividad de los más pequeños, sino también su capacidad para socializar. “El problema no es solo estar frente a la pantalla, sino lo que perdemos en términos de interacción real. Vincularse con otros en persona genera conexiones más profundas y desarrolla habilidades que no se logran en un entorno virtual”, explicó. Para la especialista, una de las claves está en ofrecer alternativas a los chicos, como juegos simples que involucren exploración y contacto con su entorno.  

Consultada sobre si los niños pueden entretenerse sin tecnología, Villa enfatizó que todo depende de las herramientas que reciban desde pequeños. “Si desde chicos les ofrecemos pantallas como único recurso, es lógico que no busquen otras formas de divertirse. Pero si incentivamos el uso de objetos cotidianos para jugar, como una olla o una rama, ellos podrán inventar sus propios mundos”, afirmó. En este sentido, consideró esencial que los adultos participen y diseñen espacios de juego alejados del exceso de estímulos digitales.  

Sin embargo, advirtió que tampoco es saludable caer en el extremo opuesto y llenar las vacaciones de actividades constantes para evitar el aburrimiento. “Ningún exceso está bien. Los chicos necesitan tiempo libre, pero también la oportunidad de descubrir cómo disfrutarlo sin la necesidad de estar siempre guiados por un plan o una pantalla”, comentó.  

Para Villa, es importante recordar las experiencias simples que solían formar parte de la infancia. “Jugar en la vereda, juntar ramitas o embarrarse bajo la lluvia son actividades que no solo estimulan la creatividad, sino que también dejan recuerdos imborrables. Yo vivía jugando en el barro, y ese momento de entrar a casa, cambiarme y sentirme calentita después de un día de lluvia era fantástico”, relató.  

En este contexto, la especialista hizo un llamado a las familias para que reflexionen sobre su rol en estas dinámicas. “La tecnología está aquí para quedarse, pero podemos aprender a convivir con ella sin que nos quite la esencia de las cosas simples”, concluyó Villa, destacando la importancia de un equilibrio que permita a los niños crecer en un entorno donde la imaginación y la conexión humana sean protagonistas.